Mi madre me contó muchas veces sobre el fallecimiento de una hija de la tía Beba (Zulma Díaz) que apodaban «Nini».
Decía que el hecho había ocurrido por las graves quemaduras que sufrió cuando se tiró encima una olla con agua de puchero o puchero hirviendo… algo así.
Por eso, cuando andaba cerca de la cocina, me decía para aleccionarme, que tenga cuidado, que no me vaya a pasar como a «Nini» y me contaba la historia, una y otra vez.
Después de mucho tiempo y de conseguir documentos que validen no solo la historia repetida de mi madre sino mis propias deducciones, he logrado dar veracidad y luz a esa parte de la vida de mi amadísima tía Beba. Aquí les comparto una síntesis.